Los últimos datos económicos muestran que el mercado laboral estadounidense sigue manteniendo un fuerte impulso, lo que sin duda debilita las expectativas del mercado sobre una posible reducción de tasas por parte de la Reserva Federal en el corto plazo. En particular, en julio, la posibilidad de una reducción de tasas casi ha caído a cero. Al mismo tiempo, Estados Unidos vuelve a agitar el garrote comercial, anunciando un arancel del 25% sobre ciertos productos de Corea del Sur y Japón, una medida que podría desencadenar una nueva ronda de fricciones comerciales, afectando así la aversión al riesgo en los mercados financieros globales.
En este complejo entorno económico, es muy probable que la tendencia del mercado repita el patrón del año pasado. Se espera que en julio y agosto veamos una tendencia de caída oscilante en el mercado, entrando en un período de ajuste estructural. Sin embargo, con el aumento de las expectativas de recortes de tasas en septiembre, el mercado podría experimentar una política de flexibilización monetaria más agresiva, como un recorte de tasas de 50 puntos básicos de una sola vez.
Es importante señalar que octubre, como un mes tradicional de rebote, sumado a un posible cambio hacia políticas de flexibilización, podría traer al mercado una ola notable de aumento. Al revisar los últimos dos años, octubre de 2023 y 2024 ha mostrado un aumento significativo, y este año es muy probable que continúe con esta tendencia estacional.
Desde una perspectiva más amplia, una vez que la Reserva Federal inicie un nuevo ciclo de flexibilización, es muy probable que China también implemente políticas de flexibilización correspondientes. Esto proporcionará un sólido apoyo al desempeño del mercado de A-shares en la segunda mitad del año. Por lo tanto, desde la perspectiva del ritmo general, la estructura del mercado de ajuste en el tercer trimestre y el rebote en el cuarto trimestre sigue siendo digna de expectativa.
Para los inversores, este momento puede ser una buena oportunidad para ajustar la estructura de sus posiciones y prepararse para el mercado del cuarto trimestre. Sin embargo, dada la incertidumbre de la situación económica global, los inversores deben seguir siendo cautelosos y prestar atención a los diversos indicadores económicos y tendencias políticas, para poder ajustar sus estrategias de inversión a tiempo.
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StableGeniusDegen
· 07-11 01:15
comprar la caída党来喽~
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ImpermanentPhilosopher
· 07-10 03:29
¿Qué pasa? ¡Nos vemos en octubre!
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NFTDreamer
· 07-08 10:51
¿Otra subida de tasas? Acostado esperando el otoño dorado.
Los últimos datos económicos muestran que el mercado laboral estadounidense sigue manteniendo un fuerte impulso, lo que sin duda debilita las expectativas del mercado sobre una posible reducción de tasas por parte de la Reserva Federal en el corto plazo. En particular, en julio, la posibilidad de una reducción de tasas casi ha caído a cero. Al mismo tiempo, Estados Unidos vuelve a agitar el garrote comercial, anunciando un arancel del 25% sobre ciertos productos de Corea del Sur y Japón, una medida que podría desencadenar una nueva ronda de fricciones comerciales, afectando así la aversión al riesgo en los mercados financieros globales.
En este complejo entorno económico, es muy probable que la tendencia del mercado repita el patrón del año pasado. Se espera que en julio y agosto veamos una tendencia de caída oscilante en el mercado, entrando en un período de ajuste estructural. Sin embargo, con el aumento de las expectativas de recortes de tasas en septiembre, el mercado podría experimentar una política de flexibilización monetaria más agresiva, como un recorte de tasas de 50 puntos básicos de una sola vez.
Es importante señalar que octubre, como un mes tradicional de rebote, sumado a un posible cambio hacia políticas de flexibilización, podría traer al mercado una ola notable de aumento. Al revisar los últimos dos años, octubre de 2023 y 2024 ha mostrado un aumento significativo, y este año es muy probable que continúe con esta tendencia estacional.
Desde una perspectiva más amplia, una vez que la Reserva Federal inicie un nuevo ciclo de flexibilización, es muy probable que China también implemente políticas de flexibilización correspondientes. Esto proporcionará un sólido apoyo al desempeño del mercado de A-shares en la segunda mitad del año. Por lo tanto, desde la perspectiva del ritmo general, la estructura del mercado de ajuste en el tercer trimestre y el rebote en el cuarto trimestre sigue siendo digna de expectativa.
Para los inversores, este momento puede ser una buena oportunidad para ajustar la estructura de sus posiciones y prepararse para el mercado del cuarto trimestre. Sin embargo, dada la incertidumbre de la situación económica global, los inversores deben seguir siendo cautelosos y prestar atención a los diversos indicadores económicos y tendencias políticas, para poder ajustar sus estrategias de inversión a tiempo.